Koh Tao es una diminuta isla de Tailandia. Es posible que nunca hayas oído hablar de ella, igual que también lo es que nunca puedas olvidarla después de conocerla. Hablamos de diminuta, pues tan solo cubre 21 kilómetros cuadrados del golfo tailandés. Muy bien aprovechados, eso sí. La “isla de las tortugas”, como sería su nombre traducido al español, es un lugar idílico sacado del cuadro más majestuoso del mejor de los artistas. ¿Exagerado? Aquí está la prueba de ello:
A Koh Tao en ferry
A Koh Tao se llega en ferry. No dispone de superficie suficiente para un aeropuerto, el mar es la única vía para llegar al edén. No obstante, los puntos de partida se triplican: Chumphon, Suratthani y la isla de Koh Samui.
Los dos primeros están dentro del continente y disponen de aeropuerto propio, de modo que se podrá llegar a ambos tanto en bus o tren como en avión. Chumphon es la opción más próxima a Bangkok, mientras Suratthani lo es de Krabi.
Por otro lado, la tercera vía es la isla de Samui y, por razones obvias, no se podrá acceder a ella por carretera. Aunque sí dispone de aeropuerto y es el punto más cercano a Koh Tao, así que será una opción a tener muy en cuenta si viajas desde fuera de Tailandia y quieres economizar el tiempo.
Elijas la opción que elijas, en la mayoría de agencias ya podrás contratar el billete de bus o de avión y el de barco a la vez.
¿Koh Tao resorts o cabaña propia?
Una cabaña o casa propia contribuye a adentrarse en la cultura tailandesa y a sentirse habitante de la isla por unos días
Viajar a Koh Tao tiene un único fin: alejarse de la vida urbana y perderse entre la verde vegetación tailandesa y sus aguas turquesas. Se abre el siguiente debate: ¿es mejor adquirir una cabaña propia u optar por la tradicional vía del resort?
El resort siempre ha sido la elección fácil, la clásica. Pocas más había no hace tanto. Por suerte, cada vez existen más posibilidades y es más común decantarse por una casa o una cabaña propia. Una alternativa mucho más personalizada y adaptada a cada perfil de viajero y a sus necesidades específicas.
El caso de Koh Tao no hace más que llevar al extremo esta situación. Las zonas de resorts son, habitualmente, también las más turísticas y masificadas; por ello, una cabaña lejos de ellas puede ser clave para alejarse del ruido y acercarse a la naturaleza. A vivir como un tailandés más por unos días.
Qué ver en Koh Tao
La visita a la isla de Nang Yuan debe ser prioritaria. Pese a no estar muy lejos de la costa de Koh Tao -unos 15 minutos-, vas a necesitar un medio de transporte acuático para llegar a la orilla de su luminosa arena. Se puede ir en barco, aunque la más extendida es la de acordar con el conductor el precio por el servicio de uno de los característicos taxi boats -conocidos como long tail– de la isla. Eso sí, hay que tener en cuenta que, al llegar a la isla, deberán abonarse 100 Thai Baths -la moneda tailandesa- para entrar en la reserva.
Las aguas turquesas de este triple islote son el escenario perfecto para la práctica del snorkel y descubrir el fondo marino de esta maravilla de la naturaleza. Un espacio que también puede ser observado desde las alturas, pues en la islita de más al sur existe un mirador público para contemplar todo su esplendor sin perder detalle.
Así, lo ideal es moverse en busca de esas playas más perdidas de la isla. Al sur se encuentra la de Chalok Baan Kao, que cuenta con la particularidad de tener una profundidad del agua muy progresiva. Literalmente hay que caminar muchos metros para bañarse en ella. No me lejos de ella se encuentra la cala de Freedom Beach. La lista es muy extensa y todas son muy dignas de ver: Ao Leuk, Tanote Bay, Mango Bay, Mao Bay, o Banana Rock.
De este modo no solo descubriremos nuevas playas sino nuevos paisajes, pues son más rebuscadas y habrá que aventurarse a encontrarlas. Otra buena opción para recorrer la isla son, precisamente, las excursiones.
Al ser tan pequeña, en gran medida puedes descubrir Koh Tao a pie -o en bicicleta-. Eso sí, siempre con un calzado adecuado, estamos hablando casi de una selva. Existen, además, algunas rutas de senderismo orientadas específicamente a ello como, por ejemplo, la que transcurre por la costa entre Chalok Baan Kao y Banana Rock, una de las más recomendables.
Los más valientes -y perezosos- pueden optar por alquilar una moto -o jeep para grupos-. Podrán recorrer Koh Tao de arriba a bajo en mucho menos tiempo y con un desgaste también mucho menor, aunque eso tenga a su vez algunas desventajas. La principal es que, una vez más, nos estamos refiriendo a un sitio de peligrosas carreteras y en el que, a la postre, se conduce por la izquierda. Habrá que ser consciente de ello a la hora de tomar tal decisión y no caer en situación frustrante o desgraciada por el desconocimiento.
Además, es también recomendable revisar el estado del vehículo en la recogida para cerciorarse de que no habrá problemas y que tampoco intenten cobrarnos por una ralladura que ya estaba.
Como no podía ser de otra manera, podrás conocer la isla incluso desde el mar, más allá del barco que te lleve a Koh Tao, subido a un típico long tail. El precio deberás negociarlo con el conductor, que quedará a tu servicio según lo acordado. Son los “taxis del mar” y muy útiles para hacer una ruta por cada una de las playas y, mucho más, para la visita al islote de Nang Yaun que no puede faltar en tu itinerario.
Lo más probable es que, después de haber exprimido al máximo la visita, estés muy cansado… y no existe mejor remedio que un masaje Thai tradicional del lugar. No solo recuperarás la energía corporal sino también la espiritual.
Antes de dar el día por acabado e irse a la cama, será esencial presenciar un nuevo fenómeno muy singular de la isla de Koh Tao: uno de sus preciosos atardeceres tropicales. Todos los tonos y las texturas se conjuran para dar lugar a otras de las escenas que ilustran las postales de Tailandia. Una viaje a Koh Tao no sería completo sin una foto de un atardecer en Sairee Beach, el lugar más famoso para presenciarlo.
Snorkel o buceo en Koh Tao
Independientemente de su incuestionable belleza, si por algo es famosa la isla de Koh Tao es por ser la meca del buceo. No solo podrás disfrutar practicando este deporte, sino que podrás sacarte el título en cualquiera de los montones de escuelas que existen en la isla. Hay diferentes niveles de titulación, desde el más básico hasta el divemaster, según el tiempo y las ganas que tengas.
Del buceo nace otra disciplina muy similar: el snorkel. Si no conocías esta palabra, básicamente hace referencia al buceo con tubo. Es una de las actividades más populares de Koh Tao y se puede llevar a cabo en cualquiera de la playas o calas de la isla.
Sin embargo, existe un lugar de la isla donde hacerlo tiene un puntito extra de atractivo y aventurado, a partes iguales: en Shark Bay. En efecto, es exactamente lo que estás pensando. En este espacio marino es muy habitual cruzarse con tiburones y tortugas… completamente inofensivos.
Shark Bay debería ser una parada obligatoria si te decides por contratar un tour de snorkeling o si el conductor de tu long tail enseña la isla desde el mar. El este de la isla, más alejado de la masificación turística, es el mejor lugar para disfrutar de la experiencia subacuática al máximo.
Para completar tu experiencia tailandesa, puedes aprovechar para tomar un nuevo ferry en dirección a cualquiera de las islas cercanas de Koh Tao o regresar al continente para descubrir ambientes diferentes de Tailanda. Algunos de los lugares más próximos a tener en cuenta son:
- Bangkok.
- Koh Samui.
- Koh Phangan.
- Phuket.
- Krabi.
Y no te preocupes, vayas a dónde vayas, siempre podrás encontrar la casa o el apartamento idílico gracias al comparador de alojamiento vacacional Hundredrooms. ¿Todavía no lo has probado?
