Esta encantadora casa a medias, que también incluye una gran terraza con cómodos muebles de jardín y una barbacoa, así como una pequeña zona ajardinada arbolada, goza de una ubicación rural no muy lejos de los Alpilles.

Los interiores renovados impresionan por su cuidado interior.

A 2 km, Saint-Rémy-de-Provence es una visita obligada: la ciudad es conocida por sus artistas, su artesanía, sus mercados provenzales y su yacimiento arqueológico.

Agradables restaurantes al aire libre y elegantes tiendas bordean las viejas y acogedoras calles con sus bonitas fuentes de agua de manantial y sus placitas sombreadas.

Residirá aquí a 15 minutos de un pueblo de montaña único que es oficialmente uno de los pueblos más bonitos de Francia: Les Baux-de-Provence.

Además de su patrimonio histórico, que incluye la Cathédrale d'Image, recibe a sus visitantes con impresionantes vistas de los Alpilles.

Un poco más lejos: el Pont du Gard, la antigua Arlés, que llama con sus antiguas arenas y es conocida por sus espectaculares espectáculos festivos (las llamadas Ferias), o Aviñón, antigua sede del Papa con sus inconfundibles ruinas de un puente arqueado, sus murallas y su festival.