Nuestro luminoso apartamento orientado al sur tiene vistas a una plaza histórica y está a la vuelta de la esquina de la casa donde Picasso y Braques alquilaron un espacio en 1911 para trabajar en sus pinturas cubistas. Está ubicado en el tercer piso de un edificio pequeño y se puede acceder en ascensor, especialmente útil para el transporte de maletas, bolsas de comestibles y personas después de un largo día de visitas turísticas. Las ventanas del piso al techo nos brindan una vista impresionante de las colinas de los Pirineos sobre los techos de teja naranja de nuestro vecino, con un cielo azul brillante que cubre la escena.

Los inquilinos a menudo comentan que nuestro apartamento está ubicado en el centro. Nuestra panadería artesanal local se encuentra a la vuelta de una esquina diferente y en una calle empedrada. Más abajo en esa misma calle hay otra plaza con una hermosa fuente y restaurantes en tres lados, un escenario perfecto para cenar al aire libre. Y el famoso Museo de Arte Moderno de Ceret, en el corazón de Old Ceret, está a menos de cinco minutos a pie.

Nosotros mismos pasamos varios meses cada año en nuestro querido "Ciel Bleu", el nombre que le hemos dado a nuestro apartamento. Quizás es por eso que algunos de nuestros huéspedes han dicho que se siente como en casa en lugar de solo una unidad que alguien ha comprado para rentas de alquiler. En las paredes, hemos colgado grabados de obras famosas del museo, y hemos colocado cerámicas coloridas en los balcones de paso fuera de cada ventana, así como en nuestro patio.

Una de nuestras cosas favoritas para hacer cuando estamos allí es levantarse por la mañana y mirar desde las almohadas la hermosa escena que se ve desde la ventana de nuestra habitación. A menudo llevamos nuestro café de la mañana a nuestra mesa de bistro en nuestro patio para que podamos seguir disfrutando de la vista. La plaza debajo de nosotros, que contiene una escultura de Manolo, es tranquila, excepto los sábados por la mañana, cuando el mercado semanal cobra vida. Luego, disfrutamos observando la escena bulliciosa de los compradores que buscan en los puestos de productos frescos locales abundantes, así como artesanías artesanales. Los sábados, después de terminar nuestro café, bajamos el ascensor con nuestra cesta de la compra y nos unimos a la diversión.

Nos encanta nuestro 'Ciel Bleu' y creemos que usted también lo hará, si se queda una semana o tres meses. Bienvenue! O Benvinguda, como se dice en catalán.