Preciosa y auténtica casa típica de viticultores de mediados del siglo XIX, totalmente restaurada, que ha conservado sus bodegas abovedadas originales, enclavada en el corazón de una tranquila aldea rural cargada de historia (antiguo pueblo vinícola rodeado aún de 230 ha de viñedos a principios del siglo XX) situada al pie de una colina boscosa al borde de prados y arboledas, a orillas del Loira, el último "río salvaje" de Europa. Agradable entorno rural en el hueco de un paraje natural preservado clasificado como "Zona Natura 2000" por la calidad de su excepcional biotopo vegetal y animal (peces, mamíferos, aves, insectos, anfibios, etc.), eje de migración, reproducción y nidificación de numerosas especies, algunas de ellas muy raras (salmón atlántico, gran sábalo, lamprea marina o anguila; patos, limícolas, martín pescador, golondrina de ribera, abejaruco europeo, etc.). Un lugar privilegiado para los amantes de la naturaleza. Casa rural confortable. Muy espaciosa. Cálido carácter rural que combina modernidad y tradición. Ambiente exótico y relajante de una antigua casa de campo cargada de historia. Gran terraza panorámica de grava, expuesta y sombreada, que se abre a un encantador jardín cerrado con césped de 700m² con vistas a la campiña circundante, ofreciendo una hermosa vista sin obstáculos.
Composición: Casa unifamiliar en dúplex contigua a otros 2 alojamientos en una propiedad familiar (total independencia sin vis-à-vis). Inalámbrico. Calefacción central de gasoil. Planta baja: cocina, salón-comedor, sala de estar (sofá cama 2 p. 140x190cm como suplemento), 1 dormitorio (cama 2 p. 140x190cm), cuarto de baño (ducha), WC separado. 1er piso: 2 habitaciones (1 cama doble 140x190cm en cada una). Terraza de grava + jardín cerrado + aparcamiento privado. Comercios y servicios 5 km. Estación 5 km. Estación de TGV de Creusot 62 km.